jueves, 25 de marzo de 2010

TRATADO DE LIBRE COMERCIO




Colombia es un país enteramente agrícola la población rural es casi una cuarta parte de la población total, que no cuenta con la tecnología suficiente para lograr mantener unos costos de producción relativamente bajos, la infraestructura con la que cuenta el país a nivel vías no es eficiente mejor diría yo, ineficiente en el cual estos costos son altos e inciden en el precio final del producto.

Otro punto fundamental para el comercio internacional son los subsidios que el gobierno estadounidense ofrece a sus agricultores, con los cuales pueden entrar a mercados externos con precios mucho menores que los productos locales.

“En el fondo de lo que trata el TLC es de ceder parte del mercado interno a cambio de ganar parte del externo. Y la evaluación adecuada de sus resultados para el país se tiene que desprender esencialmente como lo afirma Garay (2004, p.32-34)” de acuerdo con esto lo esencial es ganar mercado externamente, mercado estadounidense con productos naturales, que contengan un valor agregado como lo es el sello verde, productos frescos, pero a que costo, al costo de dejar a muchos de nuestros hermanos colombianos sin poder acceder a estos productos.

Para lograr ser competitivos nuestro campo debe realizar un revolcón en toda la cultura de producción, lograr una tecnificación de labores, hacer más eficientes todos los eslabones de la cadena productiva, sin embargo no se puede dejar suelto un tema importante como lo es el empleo con la tecnificación se reduce la mano de obra, el desempleo es evidente; debemos plantear soluciones para este problema que se va a ver reflejado a largo plazo.

Es importante medir la vocación de la tierra y desarrollar proyectos sostenibles, en los cuales hoy en día se está fallando, en conclusión Colombia no está preparada para tener este reto de un tratado de libre comercio, en el cual se van a ver afectados los pequeños y medianos productores que no van a contar con los recursos suficientes para amortiguar esta baja en los precios de los productos.


viernes, 12 de marzo de 2010

DESARROLLO AGRICOLA EN COLOMBIA


La falta de inversión agrícola, trae como consecuencias la agudización y agravamiento de la pobreza y el hambre en mundo; este fenómeno se presenta gracias a que la mayor parte de los inversionistas han dejado de creer en el campo y consideran que obtendrán mayores utilidades con la industrialización de los procesos, ya que esto trae como consecuencia optimización de resultados.

Pero lo anterior entra en una contradicción con la realidad, pues la mayor parte de la población mundial continua viviendo en lugares rurales o campestres, lo indica que necesariamente sus los medios de abastecimiento en gran parte son provenientes de la agricultura, ya sea de manera directa o indirecta. En definitiva las circunstancias nos muestran que a pesar de la globalización, industrialización, tecnificación de los diferentes procesos productivos existen poblaciones que aún subsisten a base de la aplicación de las técnicas agrícolas y tradicionales.

Este desequilibrio debe tender a desaparecer y esto se puede lograr fomentando programas de asistencia técnica de instrucción y adecuación de sistemas sostenibles; como la agricultura, la silvicultura, la pesca, etc., lo que aumentaría la producción de alimentos y la seguridad alimentaria junto con la conservación y administración de los recursos naturales. En Colombia hace falta establecer un marco legal que permita que nuestro país pueda alcanzar la soberanía agroalimentaria, a través del desarrollo de la producción agropecuaria interna integral y sustentable, estimulando y desarrollando la investigación y educación alimentaria, satisfaciendo las necesidades nutricionales de la población, y garantizando la seguridad alimentaria.

Con lo anterior lo que quiero significar es que en Colombia no realizan propuestas verdaderamente eficientes y es por esto que no existe un verdadero desarrollo agrícola, lo que requiere nuestro país para que se fortalezca el campo es Generar desarrollo independiente, apoyado en la creación de una producción y consumo, que basados en las riquezas del territorio y en el manejo interno de la tecnología, produce bloques sociales y económicos de acumulación cada vez mayores en los distintos escalones de cada cadena, produciendo el crecimiento y desarrollo, sostenido y sustentable.

Lo anterior puede ser articulado por una cadena agroalimentaria, la cual articula en el mismo proceso de análisis al conjunto de los factores involucrados en las actividades de producción primaria, transformación, conservación, almacenamiento, transporte, distribución, comercialización y consumo.

lunes, 8 de marzo de 2010

CRISIS MUNDIAL ALIMENTARIA


La seguridad alimentaria, hace referencia a la disponibilidad suficiente y estable de los alimentos, es decir, que se produzca el acceso y consumo oportuno y permanente de los mismos en cantidad y calidad por parte de todas las personas, bajo condiciones que permitan su adecuada utilización biológica, para llevar una vida saludable y activa.

Aunque en la actualidad vemos que lo anterior no tiene una verdadera aplicabilidad, puesto que miles de personas mueren a diario por hambre.

“Somos 6,1 billones de habitantes en la Tierra, de los cuales 4 billones viven debajo de la línea de pobreza. Viven con menos de US$ 30 por mes. De ellos, 1,2 billón está debajo de la línea de la miseria, de los cuales 841 millones están amenazados por la desnutrición crónica.”[1]

“Cada 24 horas mueren de hambre en el mundo 100 mil personas, entre las cuales 30 mil son niños con menos de 5 años de edad”[2]

Estas cifras muestran claramente la escasez de alimentos que azota a nuestro planeta, además de obedecer a otros factores como lo son el aumento del precio del combustible, ya que se genera un desequilibrio entre los cultivos destinados a la producción de alimentos y los cultivos que se destinan a la creación de biocombustible que permite el transporte en muchos países, y que por lógicas razones les reduce el precio del combustible de creación tradicional.

La hambruna crea situaciones que el ser humano no es capaz de controlar, pues el cuerpo le pide algo que él no está en capacidad de auto proveerse “el alimento”, y esta sensación enfrentada a la de otras personas generan necesariamente un conflicto en donde no va a mediar la razón de ninguno de los sujetos sino que por el contrario ellos empezaran a dejarse llevar por sus instintos, lo que traerá consigo el desencadenamiento de una guerra por conseguir alimentos.

En observancia de las cifras y hechos anteriores la mayoría de las empresas han impulsado y desarrollado propuestas que buscan generar posibles soluciones al problema. Algunas de ellas consideran que si aumentan la producción de alimentos reducirían la inseguridad alimentaria y se resolvería la escasez, pero esto solo se conseguirá si son apoyadas en sus propuestas por las mismas personas que padecen de esta necesidad, ya que los contratarían para cosechar sus cultivos y de este modo ayudarían a las personas a superar su hambre y conseguirían una mayor eficacia en la cosecha de sus propios cultivos y reforzarían económicamente a la región donde se establezcan. Esto muy seguramente aportaría en gran forma a impedir un conflicto proyectado a futuro.



[1] http://www.voltairenet.org/article122259.html

[2] Ibíd.